26/10/16

soy en ti
la que yo era,
por eso
tiendo la mano a la sombra,
remuevo los armarios,
tiento dónde estás
-no te rescato-,
pero acaricio el lomo tibio
de la fiera donde habitas
-bestia de sangre y flores-
mientras te canto
bajito
otro mundo que serás.

1 comentario:

José A. García dijo...

Dicen que la existencia sólo tiene sentido si es compartida...

Saludos,

J.