2/10/12

no temo por nosotros
o por el fin del mundo,
no me asustan las catástrofes
-las invento- ni la caída
lenta de los pájaros, temo
por la continuidad del tiempo,
siempre antes y después de todo
-del árbol, la roca, la mentira-
como proyecto y sombra
que nos sabía, incluso,
antes de olvidarnos.

1 comentario:

José A. García dijo...

A veces olvidamos cuáles son las cosas que realmente importan.

Gracias por el recuerdo.

Saludos

J.