rodeo la luz
la guardo entre mis manos
vigilo el fuego que se escapa entre mis dedos
custodio por ti el firmamento,
la imagen de mi piel,
y me hago faro -me renombro-
tiritándote a lo lejos rocas, algas,
las mareas que te alejen del naufragio.
te hago signos, guiños, aguardo
como un niño con la vida de un pájaro
oculta en el último bolsillo.
20/2/12
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2 comentarios:
La luz hay que soltarla poco a poco, y poco a poco la luz se libera.
Y que te digo yo ahora, eh?? :)))
Besazos enormes
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