4/4/08


A mi madre le encanta jugar con Lucía, mi prima soñadora de cuatro años, porque siempre aprende cosas de ella o descubre por donde anda su imaginación insaciable. Este sábado coincidieron en Zocueca en el campo de mi abuelo, mis tíos se decidieron a última hora, montaron a Lucía y a los mellizos en el coche y no lo pensaron más.
Después de comer, para que todos durmiesen un poquito tranquilos, mi madre salió con Lucía y la pequeña Carmen, de un añito, al porche de la casa para jugar con todos aquellos juguetes con los que Lucía se había reencontrado después de tanto tiempo. Mi madre se sentó en la mecedora con Carmen en los brazos y dijo feliz:
- ¡Oh, qué contenta estoy sentada en la mecedora de mi abuelita!
Lucía enseguida se sintió interesada.
- ¿Tu tienes abuelita?
- Sí.
- ¿Y dónde está tu abuelita?
- Está en el cielo- respondió mi madre risueña.
Lucía miró para lo alto y atacó con esa pregunta que puede llegar a desesperar:
- ¿Por qué?
Pero mi madre tiene mucha más paciencia que yo y caramelosa le explicó:
- Porque se le fue poniendo poco a poco toooodo el pelo blanco y se murió y se fue al cielo.

Después de esto continuaron jugando las dos a las casitas. Cuando mi madre se dio cuenta de que el tono de voces de Lucía subía, decidió que sería mejor que se fueran junto a una encina cercana, enorme, con bancos al rededor y un murete de piedrecitas. Lucía decidió cambiar de juego y comenzaron a jugar a las peluquerías. A ella no le hacen falta peines ni secadores, porque puede jugar con la mímica con total naturalidad. Así que se subió al banco y se puso a peinar a mi madre. De pronto paró y lanzó un grito:
- ¡Tata, tata!- rogó muy asustada- ¡Se te están poniendo todos los pelos blancos!
Mi madre comenzó a lanzar carcajadas y Lucía, temblorosa, se abrazó a su cuello.

5 comentarios:

Juan dijo...

Niños!!. ja ja . Aunque confieso que a mi edad me llegan a desesperar con sus preguntas, tienen cada cosa, cada sorpresa para nosotros.

Luar dijo...

Es una pena que con la edad las perguntas inocentes dejen de existir!! Es el encanto de los niños...

Juan Itu dijo...

que divertido,
pobre Lucía, se debe de haber asustado mucho...
los niños son tan ingenuos, tan puros...
que lindo que sean asi de claros, como el aire :)
que estes bien!!!

andrea. dijo...

... a pesar de todo extraño esa "inocencia"..
todos la vamos perdiendo..
no quiero crecer :'(
no quiero ser UNA MAS. :/

Arkadia dijo...

Los niños piensan las cosas y punto; nada de contextos, nada de causas y consecuencias. Por eso pueden ver algo que la mayoría de nosotros no: los detalles.

Saludos, es bueno pasar de vez en cuando.

Arkadia