9/12/07


Se vengó de mí por abandono,
en ausencias.
Por no decir estoy dispuesta.


Esperar le creció unas alas
para llamar a las puertas
cercanas a su casa.
Yo lo quería sólo
para que me quisiera,
y quererlo a ratos
cuando ya no me quería
ni desnuda en el espejo.


Hoy lo sueño convencido
y me arrepiento, me desmiento
con un éco en el estómago
que sabe a otra vida
debajo, en esa ciudad,
visitada a medias
entre duermevelas.
Donde sí nos permitíamos
miradas, silencios, fantasear
con hijos como amantes.


Se vengó de mí por abandono,
por darlo en adopción
y sonreírle en amenazas
con fechas de caducidad fingidas.


Hubo un mes que, mintiéndome
en la boca, me cruzó la cara.

1 comentario:

Luar dijo...

Hubo un tiempo...fue feliz.(me lo imaginaba!!!!)